martes, 2 de septiembre de 2008

Pilas de petaca (I)

En la mano tengo una canica
como las de antes:
esfera transparente y algo de naranja en su interior.
La tengo en la palma de la mano
si me la acerco bien al ojo
veo -detrás del naranja-
el más bello retrato de mi infancia.

Quiero jugar con ella.

La dejo encima de la mesa
y con el dedo índice la dirijo
arriba y abajo
derecha e izquierda
parece que aprendo a jugar con ella.
Del centro la descentro
y con una leve presión sólo
me atrevo a sostenerla entre el anular y una esquina.

Quiero más
me la paso de mano a mano
patina resbala zumba por la mesa
es rápida
le doy golpes más fuertes
de pronto, en el momento más inesperado
e insignificante
sale disparada y se me va
se me va
clavo la rodilla al suelo
se cuela bajo mi codo y cae
tic tac
y en el rebote se astilla.

2 comentarios: